Es un procedimiento muy útil para el diagnóstico de los trastornos de la voz.
La video estroboscopia ofrece la posibilidad de explorar el mecanismo de ondulación de la mucosa de las cuerdas vocales puesto que permite enlentecer el movimiento vibratorio para ser observado con detalle ya que en condiciones normales ocurre a gran velocidad y no es posible ser estudiado por el ojo humano. Gracias a poder visualizar los ciclos vibratorios de las cuerdas vocales a una velocidad de 2 a 3 ciclos por segundo mediante la luz estroboscópica, se pueden diagnosticar lesiones intracordales, irregularidades de los bordes libres, carcinomas incipientes, cicatrices etc., que de otra manera no se pueden visualizar. Permite una mejor comprensión del mecanismo fisiopatológico en una disfonía, detecta lesiones que anteriormente pasaban inadvertidas, realiza un seguimiento más fino de nuestro accionar sobre el mecanismo vocal, ya sea rehabilitador, médico o quirúrgico, y nos permite disminuir las exploraciones bajo anestesia general y la toma de biopsias en el seguimiento de pacientes donde se sospecha malignidad de la lesión mientras la famosa onda mucosa se mantenga presente.
La grabación simultánea de las imágenes en video y su estudio detenido, el análisis y medición de los desplazamientos y la correlación con el sonido a tiempo real, le ha dado un carácter muy práctico, convirtiéndola en el procedimiento diagnóstico más útil de los que disponemos actualmente para el diagnóstico de los trastornos de la voz.
La videoestroboscopia laríngea es considerada en la actualidad el procedimiento diagnóstico disponible más importante para la evaluación de pacientes con trastornos en la voz, debe ir siempre acompañada de una valoración subjetiva de la voz y una videoendoscopia flexible.
Permite documentar e identificar los aspectos fisiológicos y anatómicos de la voz hablada y cantada, confirma diagnósticos médicos, mejora la consulta y la motivación, evita la falta de diagnóstico o diagnóstico equivocado, diagnostica patologías menos frecuentes como el sulcus vocalis, permite distinguir lesiones superficiales de aquellas que infiltran para valorar tratamiento.
Servicio de Otorrinolaringología de Clínica Colón